martes, 29 de julio de 2014

NUCLEODANZA EN SUS DESAIRADOS 30 AÑOS DE HACER DANZA

In memoriam de Aurora Agüeria y Eduardo López Lemus

Por: Roberto A. Valenciano Capín

Se podría decir que de manteles largos estuvo el devenir dancístico potosino, al celebrar los 30 años de trayectoria de la compañía potosina, Nucleodanza del S.E.E.R bajo la dirección de la Mtra.  Guadalupe Orellana, al festejarlo en esta fiesta de la danza como es el Festival Internacional de danza contemporánea Lila López.

Da la bienvenida a esta celebración en lobby del centenario Teatro de la Paz, una exposición fotográfica que traza todo este proceso creativo que conlleva esta histórica celebración danzaria, bajo la lente de Edgar Gutiérrez, bajo la mirada cómplice de la también centenaria bailarina del Mtro. Arias.

Una sala que lentamente se fue llenando entre la expectativas generada en torno a esta especial función.

El telón se abrió, una señal previsora,  el llorido de un niño aunado al resonar de un celular a pesar del llamado a apagar o dejarlos en silencio los celulares y el infalible y molesto susurro de la gente.
Aún así, tres coreografía para concelebrar este hecho dancístico que inicio en 1984, al ser recordado atinadamente uno de los propulsores de este proyecto como fue el Mtro. Roberto Turrubiartes  Macías.
 3 obras que conmemoran y conjuntan su personalidad y estilo que, desafortunadamente no rompen el molde habitual de esta inercia que conlleva a esta decana compañía potosina.

 “Huellas profundas” de Francisco Torres, una coreografía insulsa, reincidente, renuente de una dramaturgia corporal, aun cuando haya sido creada como un agradecimiento a cada uno de los integrantes que han formado y lo conforman, para quedar solamente como la paráfrasis musical que la acompaña Dust in the wind.   



Al volverse mas bien un acto de replica y no replicante de los poemas creados por:  Oralia y Socorro Orellana y declamados por esta ultima. 
Una pieza “Y no dormir sin soñar” de Bárbara Alvarado que sin mas recupera un poco el aliento, ante un lenguaje propio, sostenido y con esta posibilidad de lecturas que le dan su propio sustento, a través de esta infalible pregunta ¿qué es la vida?, para de ir partir a este despliegue de movimiento  dotando de gran fluidez, intencionales, tonos y  espacio para la tensión de las diferentes conexiones humanas relacionadas con los estados de ánimo, que desafortunadamente parece quedar delimitada a las posibilidades interpretativas y técnicas de los bailarines y no detonarla, siendo una características de la creadora.


Y concluir con la tercera parte de esta trilogía  “Pétalos” del maestro, coreógrafo y fundador de esta compañía dancística, Tonio Torres. Una alegoría a esta celebración de la vida, del amor y la pasión de este camino que han recorrido esta compañía, entre alientos, caídas, siempre con estos retos y triunfos que han solventado a través de los años; de ahí de esta festividad, celebración a través de este tono de la obra, pero que desafortunadamente esta plena de desencanto, al no quedar explicita esta magia propuesta, sino quedar como una coreografía de movimientos previsibles, desencajados, no potenciados por esta energía propuesta por el creador.


Para quedar solamente en un perenne aroma de los pétalos en el escenario y los que cayeron, en donde a pesar de los movimientos suaves cubiertos de estos gestos felices y fingidos arrebatos llenos de vitalidad

Una celebración a las posibilidades reales de esta decana compañía dancística potosina o como diría el Mtro. Turrubiartes de estos guerreros a quienes confió esta enmienda de diseminar la danza y que han cumplido cabalmente al hacerlo a través de esta misión como es la enseñanza y en los escenarios.

Así como también ser también ser testigos del último danzar en este importante foro del guerrero bailarín y maestro, Juan Manuel Martínez.

El camino es confortante... visualizamos el destino ya cumplido y no nos resta mas que hacer de la danza una metáfora de lo vivido
para gritar al cielo ¡ Gracias! por unir nuestros destino...
(Rebeca  Quintanilla)


Integran Nucleodanza: Mónica Salas, Francisco Torres, Juan Manuel Martínez, Nallely Torres, Isis Chávez, Josué Ramírez, Victor Amaya, Elena Rico y Ramón Castillo (+), bajo la dirección artística de la Mtra. Guadalupe Orellana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario