El reto es sencillo ya que lo hecho por la administración de Ramiro Hernandez García es fácil de superar. |
Predecible lo sucedido electoralmente en Jalisco y en la zona metropolitana de Guadalajara por el mal desempecho de los gobiernos priistas tanto a nivel federal, estatal y municipal.
Decía un viejo amigo y colaborador Mario Méndez Acosta que todos los cambios son para empeorar, espero se equivoque y en este caso no sea así.
El reto es sencillo ya que lo hecho por la administración de Ramiro Hernandez García es fácil de superar, ya que ha sido una de las peores que ha tenido el ayuntamiento de Guadalajara, soberbio, prepotente, autoritario, distante de la sociedad, con un mal equipo integrado por recomendaciones y presiones que obviamente no funciono, de tal suerte que por ejemplo: al año entre otros se cambió en medio de escándalos de corrupción a la pintoresca regidora Elisa Ayón, en otro momento simultáneamente al Director De Obras Públicas, al Vocal Ejecutivo de COPLAUR y al titular de la Dirección de la Coordinación Metropolitana; Llego lleno de compromisos y gobernaron al más viejo estilo priista; no tuvo control sobre con su propio sindicato de trabajadores y con los vendedores ambulantes, que hicieron lo que les vino en gana.
Al año entre otros se cambió en medio de escándalos de corrupción a la pintoresca regidora Elisa Ayón. |